Semillas de Cannabis o Marihuana:
Las Semillas de Marihuana se pueden agrupar en 3 tipos claramente diferenciados.
Las semillas de marihuana autoflorecientes ode floración automática , que florecerán aunque tengamos 18 horas de luz. Estas semillas de marihuana feminizadas se caracterizan por un tiempo más corto de floración, dos meses y medio, desde su germinación.
Por otro lado tenemos semillas de marihuana feminizadas con las cuales nos aseguramos de que todas las semillas de marihuana sean todas hembras, sin machos.
El último gran grupo de semillas, las mas puristas, son las semillas de marihuana naturales también llamadas semillas de marihuana regulares. Éstas semillas de marihuana son las auténticas semillas de marihuana originales, de las cuales obtendremos tanto plantas macho como plantas hembra, que son las que nos interesan. Suelen salir mas hembras que machos. Y su calidad suele ser la mejor de estos tres grupos de semillas de marihuana.
Genética de las semillas de Marihuana:
En relación a la genética, para distinguir las diferentes características y propiedades dentro de la amplia gama de semillas de marihuana, se usan dos variedades .Cannabis Sativa y Cannabis Indica.
La Cannabis Rudelaris, es utilizada en los cruces de semillas de marihuana autoflorecientes.
La gran mayoría de semillas son híbridas en mayor o menor medida salvo en muy pocas excepciones hoy en día. Como excepción esta Original Delicatessen Seeds, que utilizan geneticas puras en sus cruces.
Sabores, aromas y efectos de las variedades de Marihuana:
En la marihuana podemos encontrar diferentes aromas y sabores, y por supuesto diferentes efectos.
Encontramos marihuana con sabor afrutado, siendo esta una de las mas buscadas. Otras plantas sativas con cruces Haze, son tambien muy buscadas por los cultivadores expertos. Hay una amplia gama de sabores y efectos.
El efecto de las variedades ya es otra cosa. Mientras que el efecto de las variedades más sativas es duradero y energético, el efecto de las variedades índicas es más narcótico y cerebral.
Aplicación medicinal de la Marihuana:
No debemos olvidar la aplicación medicinal del cannabis que sobretodo aportan las variedades índicas. Dentro de lo nocivo que puede ser el consumo de marihuana, cada día se consolida más su recomendación dentro de la medicina convencional, para tratar determinados problemas de salud.
Semillas de Marihuana
La elección de las semillas de Marihuana marcará el tipo de cultivo que producirás, por lo que es conveniente que cuenta con la máxima información posible antes de tomar una decisión.
Tipos de semillas de Marihuana
Las semillas de Marihuana han experimentado grandes cambios en los últimos años debido a los avances en el ámbito de la genética, que permite modificar las semillas de Marihuana para facilitar la labor de los cultivadores.
Hay distintos tipos de clasificación de las semillas de Marihuana:
Según su modificación genética:
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Variedades de semillas de Marihuana – Conocidas también como landraces o purebreds, son variedades autóctonas o endémicas de una zona determinada que no han sido cruzadas (hibridizadas) con otras variedades. Hay numerosas variedades pero todas pertenecen a alguna de las tres grandes categorías: Sativa, Indica y Ruderalis.
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Semillas de Marihuana Sativas – Esta clase de semillas son de mayor tamaño y de floración más lenta, por lo que son más difíciles de cultivar. Tiene su origen en las selvas de países ecuatoriales y produce efectos estimulantes gracias a su alta concentración de THC y su nivel relativamente bajo de CBD. Además, posee un sabor a maderas, incienso y cítricos.
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Semillas de Marihuana Indicas – Son más sencillas de cultivar que las sativas, con una floración más rápida (entre 6 o 9 semanas) y unos cogollos más gruesos aunque cortos. Esta variedad es originaria de las zonas agrestes de países subtropicales. Su efecto es más relajante, por su mayor contenido de CBD modera los efectos del THC en el cuerpo y la mente, y tiene un aroma muy especial a hachís, frutos secos y tierra.
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Semillas de Marihuana Ruderalis – Es autóctona de las regiones más frías de todo el mundo, generalmente por encima de los 50 grados al norte del ecuador (en lugares como Rusia y China). Crece muy rápidamente y es autofloreciente, por lo que no requiere de ciclos lumínicos. Sin embargo, sus niveles muy bajos de THC y CBD, hace que sus efectos no se perciban prácticamente, por lo que sólo se emplea si ha sido cruzada con otra variedad.
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Semillas modificadas genéticamente – Son semillas que han sido cruzadas genéticamente con otros tipos ya sea de su propia variedad u de una distintas. Incluso, existen los polihíbridos, es decir, cruces entre distintos híbridos.
Según el sexo de sus plantas
Semillas Regulares – Son las semillas que nos brindan tanto plantas hembras como machos. Son más económicas pero requieren de ciertos conocimientos para identificar y eliminar las plantas masculinas cuando comiencen a florecer, para evitar que fecunden a las plantas hembras con su polen.
Si polinizan, perderíamos una gran parte de la cosecha generando semillas. El polen de una planta macho puede desplazarse a centenares de metros y hasta kilómetros en condiciones de viento favorables, por lo que la única solución para impedir esta situación es descartar las plantas macho.
Las semillas regulares de marihuana proporcionan teóricamente un 50% de las plantas femeninas y un 50% de plantas masculinas, aunque varía en función de sus condiciones.
Semillas Feminizadas – Se tratan de semillas de Marihuana, que han sido modificadas genéticamente para no contener cromosomas masculinos. Así, cada planta que se cultive a partir de ella, florecerá como una femenina.
Esto sucede porque una planta de cannabis dispone de una predisposición mayor o menor a transformarse en macho o en hembra, en función de los cromosomas X y Y. Una planta con dos cromosomas XX se convertirá en una planta hembra en el 99.9% de las veces, mientras que una planta con un cromosoma X y un cromosoma Y, dará siempre como resultado una planta macho.
Las semillas feminizadas cuenta con dos cromosomas XX, de forma, que se asegura que el 99.9% de los resultados sean hembras.
La diferencia entre las plantas hembras y los machos, reside en que las hembras generan cogollos, con abundante resina, y los machos producen únicamente polen para fecundar a las flores de las hembras.
Por otro lado, en algunos casos las semillas feminizadas pueden producir plantas hermafroditas que disponen de las características los dos sexos a la vez, siendo capaces de autofecundarse y crear semillas.
En este sentido, las semillas feminizadas son perfectas para los principiantes porque ayudan a ahorrar tiempo, dinero y espacio, al no requerir que se descarten las plantas machos.
Según sus necesidades lumínicas
Las semillas de marihuana auto-florecientes – Se trata de una variedad de planta de marihuana creada por el cruce de Cannabis Rudelaris. Estas semillas se caracterizan por no necesitar de un ciclo lumínico determinado para comenzar a florecer, sino que lo hacen 18 días después de la germinación, sin depender del ciclo de luz-oscuridad. Una de sus ventajas es que puede cultivarse en cualquier época del año y sólo necesita dos meses para estar florecida. Además, poseen una altura baja lo que la hace más discreta y no requiere de muchos abonos ni cuidados.
Las semillas de marihuana normales (no auto-florecientes) – Estas semillas precisan de un ciclo lumínico para florecer. Pueden emplearse tanto en cultivos de interior como de exterior brindando muy buenos resultados.
Si se trata de un cultivo exterior, suele germinarse en primavera, con el comienzo de las temperaturas cálidas para que crezca en verano y florezca a principios del otoño.
En cultivos de interior podemos controlar el ciclo lumínico de forma artificial para indicarle a la planta cuando debe crecer y cuando florecer. El crecimiento debe durar mínimo cuatro o cinco semanas, que es el tiempo que precisa la planta para madurar sexualmente. Durante esta etapa, necesita de 18 horas de luz continua y 6 de oscuridad, mientras que cuando comienza a florecer se deben igualar las horas de luz y oscuridad (12 y 12).
Cuando empiezan a florecer, por lo general y dependiendo de la variedad, pasarán ocho y doce semanas hasta que estén listas para ser cosechadas. Estas semillas de Marihuana normales destacan por su gran altura y elevada producción.
¿Cómo escoger las semillas de Marihuana?
A la hora de escoger semillas de Marihuana, debemos tener en cuenta una serie de aspectos:
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El espacio – Si tenemos un gran espacio en el exterior, podremos cultivar semillas de Marihuana grandes de la variedad Sativa. Sin embargo, si vamos a cultivar en el interior o debemos ser discretos, es conveniente optar por plantas más pequeñas de la variedad Indica.
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El tiempo – Si queremos un cultivo a largo plazo y no tenemos prisa por obtener resultados, podemos apostar por variedades con ritmos lentos como las semillas normales. Si por el contrario, buscamos obtener una cosecha de manera rápida, es mejor adquirir semillas de autoflorescentes que poseen un ciclo de crecimiento más corto y florecen en apenas dos a tres semanas, estando listas para la cosecha en seis a ocho semanas.
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El efecto – Si queremos conseguir plantas medicinales o relajantes, debemos seleccionar semillas de la variedad índica, mientras que si buscamos plantas con fines recreacionales, deberemos optar por la variedad Sativa, cuyo rico contenido de THC que produce una clara sensación creativamente activa.
¿Cómo germinar semillas de marihuana?
El proceso de germinación de semillas de Marihuana es muy sencillo. Independientemente, de si vas a cultivar en interior o en exterior, la germinación se debe llevar a cabo en interior bajo condiciones controladas:
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Busca un plato o recipiente seco para colocar tus semillas sobre un pañuelo o papel humedecido (puedes emplear un pulverizador), dejando el mayor espacio posible entre semillas para que cuando saquen la raíz no se enreden. Si tienes muchas semillas, intercala capas. Después, cubre el plato o recipiente con otro utensilio similar o con papel de aluminio o plástico envolvente, de manera que las semillas permanezcan un ambiente cerrado y seco.
