Para estimular el desarrollo radicular de nuestros clones de Marihuana aplicar un poco de calor en el fondo del invernadero es siempre bueno.
Calefacción para invernaderos
Los invernaderos si no cuentan con un sistema de calefacción pueden acabar congelando alguna de las variedades que se encuentren en su interior, por eso el uso de los calefactores te permitirá acabar esas temporadas frías con muchas plantas enormes. Si logras empezar las plantas más temprano deberías cosechas unas plantas más grandes con muchos más cogollos. Los calentadores son artefactos esenciales para empezar a utilizar los invernaderos aún empezando la temporada fría. Existen calentadores eléctricos, de gasoil o gas que evitaran que el tiempo muy frío dañe a tus plántulas, ayudándoles también a crecer más rápido de lo normal. Utilizar un calentador de invernadero permite ampliar el inicio y el final de la temporada, por lo que para los cultivadores se traduce a mayor producción de las cosechas, además es necesario mantener siempre una temperatura correcta tanto al principio como al final de la temporada, asegurando que todas las plantas de marihuana tengan una provisión constante de aire fresco en el verano, para que las mismas se mantengan frescas y puedan realizar una correcta fotosíntesis.
La calefacción dentro de los invernaderos ha sido una de las innovadora resolución dentro del mundo de la horticultura. En Holanda se comenzó a utilizar en los años 60 y 80. Existen varios tipos de calefacción que se utilizan en los invernaderos y se explicarán las ventajas y desventajas. Si deseas calentar una flor o planta dentro del invernadero, se puede utilizar un sistema de calefacción localizado o centralizado, o está la opción de no utilizar ningún sistema, todo dependerá de la zona donde se encuentra la cosecha y el clima de la misma.
La calefacción central cuenta con una caldera de agua caliente o vapor con un sistema de tuberías metálicas, encargadas de distribuir el calor y la humedad dentro del cultivo. Entre sus ventajas, por ser una inversión grande se obtiene una gran capacidad, podrás utilizar combustibles más económicos y el funcionamiento será igual, puede presentar una falla o problema si no se mantiene una buena seguridad, también es un poco ineficiente si se pone a funcionar con la capacidad necesaria o cerca de la capacidad, es más recomendada la calefacción de fondo. La calefacción localizada, también se conoce como calentadores de aire forzado son aquellas unidades de calentadores de soplete o gas que se pueden utilizar por tubos de convección o calentadores infrarrojos, tienen una inversión inicial muy baja, son versátiles y adaptables, se pueden utilizar en cualquier área ya que pueden contraerse o expandirse según sea necesario, si alguna de las unidades presenta falla, cualquier otra puede cubrir el trabajo. Tienen como desventaja que son un poco más difíciles de distribuir de manera eficiente el calor.
Al analizar un poco más a fondo la calefacción central se pueden explorar dos opciones. Para el agua caliente se utiliza una caldera central, la cual llevará el agua entre 120°F y 180°F, esta agua será distribuida mediante unas tuberías de metal a lo largo del invernadero. Las bombas y válvulas se utilizan para distribuir de manera uniforme el calor y asimismo controlar cuánto calor saldrá del invernadero. Se tendrá un mejor control de la temperatura, con cambios graduales de la temperatura y en el mismo se pueden utilizar grandes volúmenes de agua. Con el sistema de vapor, se necesita una caldera más pequeña, cantidad menores de tuberías y no necesita ninguna bomba de circulación. Puede resultar más difícil el controlar el flujo de calor o vapor que saldrá hacia el invernadero, pero tendrá un rápido ingreso del calor y los cambios de temperatura serán más rápidos y son más posibles. Generalmente se utilizan sistemas de baja presión en los invernaderos, el agua se expanderá y se convertirá en vapor causando fuerza y presión de vapor desde la caldera y recorrerá las tuberías hasta llegar al invernadero. Cuanto más se condense, se irá perdiendo volumen y la condensación se drenara de regreso hasta la caldera por gravedad. Un solo pie cúbico de agua se puede expandir hasta 58.8 pies cúbicos de vapor. Los tubos de vapor tienden a ser más pequeños que los de agua caliente por su menor resistencia al flujo y su alta pérdida de calor. La caldera en este caso debe distribuir el agua caliente o vapor dentro del invernadero.
La distribución puede realizarse por tubo/riel, esté es un método comúnmente usado para la calefacción de los invernaderos, además de ser muy importante para sacar la humedad del mismo. El sistema es recomendable encenderlo en las mañanas, ya que es cuando el tubo se encuentra mínima, así podrá sacar el exceso de la humedad presente en el invernadero obteniendo un mayor clima dentro. Una de las herramientas más importantes es el control de temperatura dentro del control de la humedad de los invernaderos. Los sistemas de calefacción debajo de las mesas se utilizan cuando existen macetas en mesa, por lo que se necesita un sistema de calefacción parecido al de tubo/riel pero que se encuentre debajo de las mesas de los cultivos. También se puede utilizar la calefacción dentro del piso, está se realiza por unos tubos que se encuentran enterrados en el piso, los cuales se calientan, produciendo movimientos de aire de efecto positivo en la humedad concentrada alrededor de la planta y se remueve. Este sistema ofrece más libertad a los trabajadores ya que no interrumpe las actividades.
En las áreas donde los inviernos son muy heladas se puede utilizar la calefacción sobre la cabeza, ya que será una fuente de calefacción extra, es un sistema compatible con las canastas colgantes, aunque es una fuente extra, este sistema le quita mucha luz a las plantas. La distribución de calor perimetral ayudará cuando el invierno sea muy frío y el sistema normal no pueda detener todo el frío, está calefacción en el perímetro será de gran ayuda. Es importante mantener un buen sistema de calefacción en los invernaderos si se localiza el cultivo en una zona muy húmeda o fría, ya que se mantendrá la calidad de la producción en el interior sin verse afectada por todos los elementos que pueden disminuir tu producción y la calidad de la misma.